4 d'agost de 2004

Sufrir el compresor

Realmente es indignante la falta de sentido común, civismo y respeto a la convivencia de algunos vecinos. A parte de normas sobre la instalación de los compresores de aire acondicionado, tendría que haber el posterior control por parte de alguna entidad o que las mismas empresas que instalan estos monstruos, sólo tengan permiso de hacerlo donde no molesten a nadie.

Ya existe una norma, pero es meramente estética: la de no poder colocar los aparatos en los balcones de las fachadas que dan a la calle, por lo que la mayoría los instala en el patio de luz o en la fachada del interior de la isla de casas, donde molestan a la gente que está durmiendo. ¡Cuánta impotencia!

No estoy segura de si a Helena Martínez (carta publicada el pasado 26/VII/2004) le serviría de algo dirigirse a la Associació Catalana Contra la Contaminació Acústica. ¡Suerte!

SUSANNE HÖPPNER
Barcelona

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