La concesionaria anuncia que durante el periodo de pruebas se aplicarán medidas correctoras para reducir el impacto acústico
Grupos de vecinos atribuyenal Trambaix un exceso de ruido

S. ANGULO / Ó. MUÑOZ - 26/02/2004
BARCELONA Nuevo frente contra el Trambaix. A su impacto sobre el resto del tráfico rodado –ya sea porque actúa como barrera o porque la señalización en los cruces no es suficientemente clara– se suma ahora el exceso de ruido que produce durante el periodo de pruebas. Algunas de las asociaciones de vecinos de los barrios de Barcelona y el Baix Llobregat por donde pasa el nuevo medio de transporte lo han rebautizado con el nombre de “el ruidoso” y han convocado una manifestación de protesta que tendrá lugar el próximo martes. Los vecinos quieren que con esta medida de presión –incluso amenazan con parar la circulación de los convoyes– se busque una solución para acabar con las molestias que origina el Trambaix. Sostienen estas entidades que el tranvía produce molestias en todo su recorrido y que éstas se acentúan en las zonas con curvas pronunciadas, algo que se repite especialmente en el tramo comprendido entre la Zona Universitària y la carretera de Collblanc.

La presidenta de la Associació de Veïns de la avenida Xile, Marta Prats, insiste que el tranvía es un ferrocarril en superficie que supone mucho ruido. “Nos han engañado, dijeron que era un transporte silencioso, y la gente ya está desesperada porque el tranvía circula de cinco de la mañana a doce de la noche”, explica. Los vecinos mantendrán mañana una reunión con la Associació Catalana contra la Contaminació Acústica (Accca) para que elabore un estudio independiente sobre los ruidos y las vibraciones producidas por los convoyes. Las entidades también han tenido contacto con diversos arquitectos para determinar las repercusiones que pueden tener los temblores en los edificios cercanos.

Las quejas se suceden también en el resto de los municipios por los que transcurre el Trambaix. Las asociaciones de vecinos de Pubilla Casas, Collblanc y la Torrassa se han sumado a la manifestación convocada para la próxima semana. Mientras que en Esplugues de Llobregat los vecinos han repartido octavillas en los que califican de “bodrio” la nueva infraestructura y critican las rotondas y semáforos que ahora pueblan las calles del municipio y, según ellos, dificultan la movilidad de un lado al otro de las vías.

Un portavoz de la concesionaria Tramvia Metropolità ha explicado que se está trabajando durante el periodo de pruebas para disminuir el impacto acústico de los convoyes. “En parte –añade– es normal que ahora se note el ruido porque la infraestructura es totalmente nueva, cuando esté más rodada, este ruido disminuirá.” Una de las medidas previstas para los próximos días es engrasar toda la vía. Esta actuación, según el portavoz, debe ayudar a reducir las actuales molestias. Paralelamente, el distrito de Les Corts ha hecho unas mediciones de los tramos más conflictivos y propondrá medidas correctoras. Una de ellas podría ser la colocación de elementos vegetales (árboles o setos) que actúen como pantallas acústicas. Las concreciones de este estudio se conocerán la semana que viene.