Un estudio revela que los niveles
de ruido que alcanzan algunos pubs de Gandia causan
sordera
Concluye que el caos del tráfico
dispara la contaminación acústica
Gandia es una de las ciudades
con más contaminación acústica. Esto es así por el gran volumen de
población que tiene, cifra que se traduce en numerosos vehículos y
motocicletas. Al tráfico colapsado se añaden los locales de ocio con
un horario intempestivo y que en algunos casos su elevada música
puede causar sordera.
Los estudios sobre contaminación
acústica señalan que el ruido es un gran problema no sólo en las
grandes ciudades sino también en las medianas y pequeñas como es el
caso de la capital de la Safor. Esta conclusión forma parte de un
informe elaborado por expertos de países europeos en acústica que
revela que el nivel de ruido que se alcanza en algunos pubes de
Gandia es causa de sordera.
José Romero, responsable del
grupo de Medio Ambiente de la Federación de Asociaciones Vecinales
de Gandia y profesor en la Universidad Politécnica de Valencia, es
el autor de este informe. El ruido es, según José Romero “un
problema cada vez más acuciante en la ciudad ducal”.
Las
fuentes que originan el ruido varían. Las hay de todo tipo. Desde
los bares y locales como salas de fiesta y discotecas que no cumplen
con la normativa a la que les obliga su actividad, pasando por
carreteras, trenes, ascensores, puertas de portales, garajes, bombas
de fluido (gases y agua caliente), aires acondicionados o los ruidos
causados por los defectos en la construcción de algunos edificios,
sobre todo los más antiguos.
Pero también hay ruidos que se
producen de forma muy puntual: el tráfico, paradas de autobuses o
las máquinas que recogen la basura o los escombros del suelo.
Este es el principal problema que Gandia está teniendo en
los últimos años y que más se está acuciando. Esto se debe al
incremento de población, así como, al paralelo aumento de vehículos
especialmente de motocicletas.
“El tráfico está colapsado,
no hay suficientes aparcamientos y las molestias no sólo las
producen los motores sino el alto volumen de la música de los
coches”, explicó.
Información y educación
Por tanto, según el profesor Romero, Gandia reúne dos
problemas actualmente y que son, por un lado, el colapso de tráfico
que está padeciendo la ciudad y, por otro, la educación.
El
oído a diferencia de la vista está conectado día y noche Es nuestra
alarma y hay que cuidarla. Por tanto, hay que enseñarle a la
juventud que el “problema del ruido es un problema de salud” y que
escuhar de manera permanente sonidos que rodeen los 60 decibelios
puede provocar lesiones o sordera.
Enfrentarse al ruido que
genera cualquiera de esas fuentes es mucho más fácil que tener que
iniciar un largo proceso administrativo ante un vecino que origina
lo que se denomina ruidos domésticos, y que poco a poco van haciendo
mella en el afectado hasta provocarle trastornos físicos y
psíquicos.