Toda la noche sin dormir por las obras del
Metro
En Blas Infante las máquinas trabajaron
hasta las cuatro de la mañana y, a mitad de República
Argentina, arrancaron de nuevo poco después: a las 5.15
horas
Toda la noche sin
pegar ojo. Eso es lo que les pasó la madrugada del martes al
miércoles a una gran parte de los vecinos de República
Argentina. Unos, porque las máquinas de las obras del Metro de
Sevilla no pararon hasta las cuatro de la madrugada, y otros,
porque se retomaron a las 5.15 h.
Además del insufrible
ruido, estos sevillanos soportan otras molestias por culpa de
las obras. Son éstas: suciedad, vibraciones en los edificios,
arquetas de la calle que se han movido y se han desprendido
placas de las fachadas. «Conozco a gente que se le ha roto
alguna pieza de porcelana», comenta una vecina del barrio.
«No estamos de acuerdo con este tipo de medidas, pero no
hay otra opción», aseguran a 20 minutos fuentes de
Ferrocarriles Andaluces. En esta empresa sí conocían que los
obreros trabajarían hasta las 4 de la mañana en Blas Infante.
La explicación que dan es que las máquinas son muy complejas y
no pueden parar hasta que terminan un tramo. Sin embargo,
Ferrocarriles ignoraba que un poco más tarde, a la altura del
n.º 38 de República, las máquinas arrancaron de nuevo.
«Estamos agujereando el suelo para la tuneladora. Se ha
empezado tan temprano porque vamos apurados de tiempo»,
explica un obrero. Las obras del Metro afectan en los Remedios
a 4.500 vecinos y 1.838
viviendas. |