El plan de regulación del ruido de los bares musicales leoneses contará con un sistema centralizador de limitadores acústicos, que permitirá mediante una intranet registrar cualquier anomalía en tiempo real, mediante la tecnología GPS, para adoptar posteriormente las medidas punitivas estipuladas.

El dispositivo, que da un paso más en la estrategia para que los locales cumplan con escrupulosidad la normativa vigente y se respeten los niveles de contaminación ambiental, iniciará su funcionamiento en las próximas fechas, toda vez que ayer se diera de alto el expediente de contratación del servicio en la reunión de la mesa del ruido.

Un total de 80 establecimientos se verán inmersos dentro de la regulación obligatoria, a los que se deberán unir los que posteriormente tomen licencia de funcionamiento, por lo que la implantación del sistema se efectuará de forma gradual. Las estimaciones de la Concejalía de Medio Ambiente, cifran el plazo de conexión de la masa de bares musicales en dos años.

El gasto derivado de la colocación del operativo por parte de los hosteleros leoneses contará con una línea de subvenciones dispuesta por el área dirigida por Humildad Rodríguez, que tomará como primeros beneficiados a los establecimientos que ya cuentan con limitadores.

La idea primigenia del proyecto de control de ruido coloca la central de llegada de los avisos en el edificio del Ayuntamiento de León, aunque se estudia la posibilidad de que la Universidad se integre en el proyecto de una manera más funcional y adopte responsabilidades mayores.